Derechos que conoce, derechos que respeta
1.095 son los días en los que los campesinos y campesinas de Arauca y 2 regiones más del nororiente colombiano, aprenderán, se capacitarán y fortalecerán sus organizaciones campesinas.
Más exactamente, son 3 años en los que Humanidad Vigente se propone «contribuir a la construcción de una cultura de defensa de los derechos humanos desde las organizaciones sociales en el marco del conflicto armado colombiano», según el objetivo general de este proyecto que se desarrolla también en el Magdalena Medio y el Catatumbo.
Su progreso se hace realidad por el apoyo de la Asociación Catalana por la Paz (ACP) que «actualmente, financia a Humanidad Vigente, a la agencia Prensa Rural y a una organización de acompañamiento internacional», como lo menciona la coordinadora del proyecto, Ángela Higuera.
El plan de trabajo, está basado en las cuatro estrategias de Humanidad Vigente: en primer lugar, un acompañamiento jurídico integral en casos de violaciones de derechos humanos; seguido del componente educativo en donde se trabajan talleres para brindar herramientas de protección a los DD.HH y defensa del territorio; la investigación, más adelante, hace su aporte a la labor ya que permite hacer un seguimiento a la situación de los DD.HH y el último elemento, una campaña para impulsar los derechos, la libertad del Catatumbo y la «Defensa para los Defensores de DD.HH».
Esta estrategia de trabajo va dirigida a la Asociación Campesina de Arauca (ACA), la Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat) y la Asociación Campesina del Valle del río Cimitarra (ACVC), a la cual se le hace un acompañamiento especial para lograr el levantamiento de la suspensión, impuesta por el Gobierno, de la de Zona de Reserva Campesina del Valle del río Cimitarra .
No obstante, no sólo se hace un acompañamiento especial a la ACVC. Para estas 3 asociaciones se han preparado talleres con el objetivo específico de conformar, impulsar y «fortalecer comités de derechos humanos», explica la coordinadora.