Bombardeos contra niños, niñas y adolescentes, una práctica sistemática de la Fuerza Pública de Colombia
Imagen tomada de: Plataforma Colombiana por el Protagonismo de Niños, Niñas y Jóvenes
Que niños, niñas, adolescentes y jóvenes mueran producto de un bombardeo de las Fuerza Pública de Colombia no es un hecho aislado. Todo lo contrario, parece haberse convertido en una práctica sistemática del Estado colombiano. Lamentablemente vuelve a suceder que, luego de un ataque aéreo contra un campamento del ELN fueron asesinados cuatro niños entre trece y diecisiete años[1]. Fue el Senador Iván Cepeda quién difundió la información tras recibir la confirmación por parte del Instituto Nacional de Medicina Legal que en el operativo denominado “Operación Samuel” llevado a cabo el pasado 16 de septiembre del año en curso, en el municipio de San Luis, departamento del Chocó, en contra del frente militar occidental del grupo guerrillero, la mitad de las personas fallecidas fueron niños y adolescentes, entre ellos una mujer[2].
Como ya se ha hecho en situaciones similares, el Gobierno colombiano, en cabeza del Ministro de Defensa de turno, -hoy, Diego Molano- ha ocultado la información sobre las víctimas menores de edad, y más grave aún, ha persistido en este tipo de acciones militares indiscriminadas que violan el derecho a la vida y a la protección especial de las niñas, niños y jóvenes. De igual forma lo hizo el Ministro del Interior, Daniel Palacio, quien el pasado 20 de septiembre, destacó mediante un anuncio público que había sido una “operación quirúrgica” y de “alta precisión” por el “profesionalismo y gallardía de las fuerzas militares”[3].
Cabe recordar que desde el año 2010 se cuenta con el registro de, por lo menos, siete hechos similares en los que mueren menores de edad por bombardeos[4]. En agosto de 2019 se hizo pública la información sobre el asesinato de al menos, ocho niñas y niños en el Caquetá en medio de la operación militar ‘Ataí’. En esa ocasión, el gobierno nacional, ocultó la información relacionada con la muerte de los menores de edad a pesar que fue demostrado su previo conocimiento de la presencia de niñas y niños en el campamento[5]. Además, en marzo de este año se conoció que durante el operativo militar contra el frente Gentil Duarte de las disidencias de las FARC, se bombardeó el campamento en el que había al menos cuatro menores de edad[6]. Esta información fue nuevamente ocultada por parte de las autoridades y además justificada a través de mensajes revictimizantes en contra de niñas y niños reclutados forzosamente al calificarlos como “máquinas de guerra” por parte de Ministro, Diego Molano[7].
Desde Humanidad Vigente hemos rechazado estos hechos de violencia Estatal que atentan contra los principios del derecho internacional humanitario y el derecho internacional de los derechos humanos. En particular, el principio de precaución exige que se adopten todas las acciones, especialmente de inteligencia militar, para prevenir daños innecesarios en perjuicio de grupos vulnerables como las niñas y los niños. Este principio desconocido por las fuerzas militares guarda estrecha relación con el interés superior de la niñez consagrado en el artículo 44 de la constitución política y la Convención de los Derechos del Niño. A esto se suma las cifras de reclutamiento forzado y utilización de menores de 18 años por parte de actores armados legales e ilegales en diferentes zonas del país.
Las operaciones militares exigen una actuación más efectiva por parte de las autoridades en el momento de realizar inteligencia militar para prevenir violaciones de derechos humanos en perjuicio de la niñez, particularmente asesinatos.
Es altamente preocupante que en estos tres hechos la actuación del Gobierno Nacional sea ocultar la información alusiva a niñas, niños y adolescentes asesinados, pues evidencia una política recurrente de negación a estas graves violaciones de derechos humanos y a su vez se hace reflejo del desinterés por la protección de la niñez en contextos de conflicto armado que, de acuerdo con el Secretario General de las Naciones Unidas, deben ser tratados en todos los escenarios como víctimas[8]. Ocultar esta información, además de ir en contra de los principios de la administración pública, denota el incumplimiento al deber de debida diligencia al no investigarse las graves violaciones de derechos humanos en perjuicio de niñas y niños reclutados por grupos ilegales y asesinados por parte de agentes estatales.
Lamentamos las muertes de todas las niñas, niños, adolescentes y jóvenes en estas operaciones militares, al igual que el reclutamiento forzado siga siendo una realidad a la que el Estado colombiano no ha dado la debida atención para evitarlo. Nos solidarizamos con sus familias y comunidades.
Reiteramos nuestro repudio y rechazo a los asesinatos de niñas y niños en medio de operaciones militares las cuales no se llevan a cabo siguiendo los estándares internacionales en contextos de guerra y en materia de protección especial y superior de niñas y niños.
Exigimos que se adelanten investigaciones inmediatas de estos hechos siguiendo los principios de debida diligencia, imparcialidad y juez natural, por parte de la jurisdicción ordinaria.
Hacemos un llamado a la comunidad nacional e internacional para que haga seguimiento de la situación y exija al Estado colombiano el respeto por los derechos de los niños, niñas y adolescentes que padecen de múltiples afectaciones a sus derechos. Alzamos la voz para alejar a la niñez de la guerra y a reconocer su condición de víctimas, teniendo como principio en toda acción militar y estatal, rescatarles, protegerles y repararles.
[1] https://www.elespectador.com/judicial/vuelve-y-juega-en-bombardeo-al-eln-en-choco-murieron-cuatro-menores-de-edad/?jwsource=cl
[2] Ibíd.
[3] https://twitter.com/DanielPalam/status/1440008698659852289?s=20
[4] https://www.elespectador.com/colombia-20/conflicto/no-es-la-primera-vez-que-mueren-ninos-en-bombardeos-de-la-fuerza-publica-article/
[5] https://www.dejusticia.org/column/dih-y-los-ninos-victimas-de-reclutamiento-ilicito/
[6] https://humanidadvigente.net/bombardeos-una-practica-de-guerra-que-se-ha-vuelto-sistematica-contra-las-ninas-ninos-y-jovenes-en-colombia/
[7] https://www.elespectador.com/judicial/son-maquinas-de-guerra-asi-justifico-diego-molano-bombardeo-a-adolescentes-article/
[8] Secretario General de las Naciones Unidas. Los niños y el conflicto armado en Colombia. S/2019/1017. 31 de diciembre de 2019. Recomendación 1.