Tres menores afectados por explosión en Tierralta, Córdoba
En la vereda Altamira, municipio de Tierralta, departamento de Córdoba, el día miércoles 16 de julio hacia las 6:40 pm, se escucharon dos explosiones y una tercera que cayó a pocos metros de la vivienda de Félix Padilla, presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda Altamira compuesta por 23 familias y asociada a ASODECAS. El artefacto explotó justo en la cancha de fútbol donde se encontraban los menores, dos de ellos heridos por el impacto y un tercero con afectaciones sicológicas. De inmediato los menores heridos fueron trasladados hasta el casco urbano de Tierralta. El niño que fue herido en la pierna tuvo que ser remitido hasta Montería por la gravedad de sus heridas y a esta hora se encuentra estable. En este mismo hecho dos mulas que pertenecían al señor Padilla quedaron gravemente heridas.
Deybis Nisperuza, de quince años, fue herido por una esquirla que le atravesó la pierna izquierda, de ahí fue trasladado hasta el hospital de Tierralta desde donde lo remitieron a Montería. Víctor de Jesús Gaviria, otro menor de quince años, también fue víctima de la explosión al ser alcanzado por una esquirla en uno de sus oídos por el que jamás podrá volver a escuchar. Mario Padilla, de tan solo diez años, es el tercer niño perjudicado no solo por la explosión sino también por los constantes enfrentamientos militares entre la insurgencia y el Ejército Nacional en la zona. Cada que el niño escucha ruidos fuertes como truenos o semejantes se asusta y dice: «son las balas o explosivos que lo van a matar» según los habitantes de la vereda Altamira.
Los enfrentamientos en esta zona son constantes. En el camino entre la vereda Altamira y el Corregimiento de Crucito se encuentra una base militar a cargo del coronel Trejo adscrita a la brigada móvil N° 24 del Batallón Junín con sede en la capital cordobesa. Los enfrentamientos casi siempre son a la mismas hora 6:00 pm y ponen a la población civil en constante riesgo.
El Propio, periódico regional de corte sensacionalista perteneciente al grupo editorial El Meridiano, reconocido por las relaciones de sus propietarios con Salvatore Mancuso y la clase política tradicional y dominante del departamento de Córdoba, registró la noticia afirmando: «la explosión provino del patio de la casa de uno de los campesinos» y más adelante asegura: «todo indica que uno de los animales fue el que pisó y activó el artefacto explosivo» insinuando que fue una mina anti persona la que estalló; aunque este medio también reporta que: «las autoridades no se habían pronunciado».
Recordemos que hasta el corregimiento de Crucito hace apenas un mes se dirigió una comisión de verificación con acompañamiento internacional que recogió un informe de Derechos Humanos presentado a la autoridades departamentales y municipales por la situación presentada el miércoles 11 de junio en la vereda Igueronal, en la que diez campesinos resultaron retenidos por el Ejercito Nacional. En Igueronal también fue encontrada una granada en forma de trampa a solo 20 metros de donde había desembarcado el helicóptero del Ejército. Ante lo cual un uniformado le dijo a un campesino «si la guerrilla siembra minas nosotros sembramos granadas».