Día de la mujer, la violencia contra lideresas y defensoras de DDHH persiste en Colombia

8 marzo, 2023

Actualidad, Niñas, niños, adolecentes, jóvenes y mujeres

Han pasado 48 años desde que Naciones Unidas formalizó el Día Internacional de la Mujer como una fecha a conmemorar cada 8 de marzo, en reconocimiento a aquellas mujeres luchadoras, trabajadoras y empoderadas que se levantaron hace más de cuatro décadas y que lo siguen haciendo para hacer escuchar sus voces en búsqueda de la igualdad.

En Colombia, las mujeres han tenido un papel importante y significativo en la construcción de paz y desarrollo de la sociedad. Las lideresas y defensoras de derechos humanos, del territorio y del medio ambiente trabajan constantemente para alcanzar y proteger los derechos de las personas menos escuchadas y en condición de vulnerabilidad, sin embargo, este caminar de la defensa sigue acompañado de consecuencias negativas para la vida e integridad de las mujeres. Desde la firma del Acuerdo de Paz hasta el año 2022, la Oficina de la Alta Comisionada de la Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) registró un incremento en asesinatos de personas defensoras de derechos humanos contando 541 asesinatos, entre los que hay 65 mujeres^[1].

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) indicó que Colombia es uno de los países con más asesinatos en los últimos cuatro meses del 2022, la OACNDUH verificó 26 casos y 20 más se encontraban en proceso de confirmación^[2]. Así mismo, el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) registró 13 asesinatos a lideresas sociales, defensoras de derechos humanos y firmantes del Acuerdo de Paz durante 2022^[3]. Mientras que en lo transcurrido del presente año, Indepaz ha registrado 3 casos^[4]. Estas cifras dejan ver no solo que la situación de las mujeres defensoras, lideresas y quienes le apostaron a la paz, siguen siendo víctimas de la violencia, persecución, hostigamiento y de asesinatos como consecuencia de la labor que han abanderado en sus territorios y comunidades.

Es clave trabajar en la defensa y protección de los derechos de todas las niñas, jóvenes, mujeres, lideresas, defensoras de derechos humanos, del territorio y del medio ambiente, quienes han sido violentadas históricamente. Enaltecemos la lucha de cada una de las mujeres que han alzado la voz, que siembran y replican sus saberes para construir una comunidad coherente, tolerante, amable con la naturaleza, en pro de una vida digna para todas y todos, especialmente en zonas permeadas por la violencia, el narcotráfico y el poder económico de las grandes empresas extractivistas.

La lucha por la igualdad de condiciones en escenarios políticos, laborales, económicos; por el respeto a cada una de las labores que ejercen las mujeres en sus diferentes roles; por su seguridad e integridad en los espacios donde habitan, transitan y laboran; por la justicia para las víctimas de violencia física, sexual y psicológica perpetrada por agentes del Estado, debe continuar de la mano de todas y todos.