Comunicado del Catatumbo sobre plantón en Gobernación de N. Santander
Campesinos y campesinos del Catatumbo exigen interlocución directa con el Gobierno Nacional.
Comunicado a la opinión pública
Campesinos y campesinos de la región del Catatumbo nos movilizamos hoy 3 de noviembre de 2010 para exigir al Gobierno la reactivación de las Audiencias Populares y la Mesa de Interlocución y Acuerdo (MIA) como espacios legítimos del campesinado para la construcción del plan piloto de sustitución de cultivos, el diagnóstico, apoyo y ejecución del plan de desarrollo propio y el impulso de la zona de reserva campesina como estrategia de defensa y permanencia en el territorio de las familias campesinas.
Igualmente, exigimos la presencia de una comisión gubernamental de orden nacional para la interlocución directa con el Comité Permanente de Refugio Humanitario, así como la manifestación pública de la voluntad política y total respaldo por parte de Acción Social y el Gobierno Nacional a los 7 criterios para el plan piloto de sustitución de cultivos que presentamos hace un año como alternativa propuesta desde la base campesina para reemplazar las los programas de erradicación manual forzada no concertada y que entre otras consecuencias originó las recientes protestas campesinas en la región del Catatumbo.
El Comité Permanente de Refugio Humanitario es una iniciativa organizativa que se conforma como consecuencia de:
La intensificación de la implementación de políticas de fumigaciones y erradicación manual forzada, acompañada necesariamente de una gran militarización de la zona, que provocó en los habitantes de la región, miedo, zozobra y unas condiciones de inseguridad alimentaria, ya que la mayoría de estas comunidades dependen de la economía que gira en torno a los cultivos de uso ilícito, y las propuestas de sustitución de cultivos presentadas por el Gobierno no fueron concertadas con la comunidad y no responden a las necesidades del campesinado. Esta situación evidenció el riesgo de desplazamiento forzado nuevamente para estos campesinos, que ya están cansados de vivir en constante desplazamiento.
Las amenazas de la Fuerza Pública de adelantar capturas y judicializaciones a este tipo de actividades, la quema y destrucción de los sitios de vivienda y trabajo de los campesinos, cuyas actividades relacionadas con la siembra o recolección de la hoja de coca que son públicamente conocidas y socialmente aceptadas, provocó que se impactaran gravemente y se violaran los derechos humanos, ya que la vida, la libertad, la seguridad, la tranquilidad y la integridad personal, así como otros derechos se afectaron con la implementación de estas políticas y programas antinarcóticos y esto ocasionó que se presentaran varios desplazamientos.
Ante esta situación y en una posición de resistirse a un desplazamiento más gravoso, para las familias, como salir a algunos cascos urbanos o ciudades, las comunidades optamos por la alternativa del refugio humanitario dentro de la misma región. Es así que el 29 de abril de 2009, en la vereda Caño Tomás, del Corregimiento de Fronteras del Municipio de Teorama, Norte de Santander Colombia, SE CONFORMÓ EL REFUGIO HUMANITARIO POR LA VIDA, TENENCIA DE LA TIERRA Y LA PERMANENCIA EN EL CATATUMBO como una forma de protección y prevención al desplazamiento forzado.
Al refugio humanitario llegaron decenas de familias, que enfrentaron estas difíciles situaciones alimentarias y económicas, pero también contaron con el apoyo, solidaridad y hermanamiento de otras veredas, quienes no sólo enviaron alimentos (yuca, plátano y carne), sino que se movilizaron hasta el campamento humanitario para apoyar con trabajo y construir los espacios para el alojamiento y alimentación de las familias, de igual manera para reflexionar y plantear algunas propuestas de resistencia, no sólo frente a la situación de las fumigaciones, sino como respuesta social y campesina, a otras graves amenazas, como la explotación de carbón a cielo abierto, de petróleo, la violación a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario y los graves impactos que ha traído la militarización en la zona, y por supuesto un justo reclamo por el abandono estatal, y la grave situación humanitaria y social por la que hemos tenido que pasar en los últimos años, agudizándose cada vez mas.
Desde hace un año campesinos y campesinas de más de 60 veredas, han venido apoyando y trabajando para el refugio Humanitario, analizando la situación y proponiendo siempre alternativas de solución, una de estas fue la conformación de la Mesa de Interlocución y Acuerdo MIA, un espacio que fue creado y promovido por los campesin@s para encontrarse con las autoridades locales, regionales y nacionales para contarles las problemáticas de la región, presentarles alternativas y exigirles atención y resolución de la crisis.
Esta mesa se conformó el 2 y 3 de agosto de 2009 en el refugio humanitario, se comprometieron 33 autoridades del orden nacional, regional y local a participar activamente de ella y trabajar por y para el Catatumbo. Se propuso en el Marco de la MIA el desarrollo de las Audiencias populares en los municipios de Convención, Hacarí, Tibú, Teorama, El Carmen, El Tarra y San Calixto. Sin embargo, desde el inicio de este espacio las autoridades masivamente incumplieron los acuerdos pactados, fueron mentirosos y engañaron a los campesinos.
El 20 y 21 de agosto, 800 campesinos representantes de más de 70 JUNTAS DE ACCIÓN COMUNAL Y ORGANIZACIONES COMUNITARIAS de los municipios del Carmen, Convención, Teorama, Hacari, San Calixto, El Carmen y El tarra La Playa y Abrego de la región del Catatumbo, reunidos en ASAMBLEA CAMPESINA en el Campamento Refugio Humanitario «Por la vida, la dignidad, la tenencia de la tierra y la permanencia en el Territorio» esperaron encontrarse con esas mismas 33 autoridades que exactamente hace un año se comprometieron a estar allí y no asistieron, como la Gobernación de Norte de Santander, La Procuraduría regional, la Defenoria regional, las Personerías y alcaldías de los 7 municipios, INCODER, CORPONOR, Parques Nacionales Naturales, Acción social, entre otras.
Cansados del incumplimiento a los compromisos acordados hace un año en la Mesa de Interlocución y Acuerdo y a lo largo de las 7 audiencias populares, y conscientes del irrespeto, las mentiras y la desatención de las autoridades locales, departamentales y nacionales a la situación de crisis humanitaria, económica y social del Catatumbo y la falta de compromiso y voluntad política para tomar en serio a los campesinos y el diálogo que con mucho esfuerzo han promovido para participar y decidir sobre las alternativas de salida a la crisis, se creó el COMITÉ PERMANENTE DE REFUGIO HUMANITARIO EN LA REGIÓN DEL CATATUMBO, como segunda fase en este proceso de lucha y resistencia para la búsqueda de la vida digna en el Catatumbo.
Este comité lo integran varios representantes de las diferentes zonas del Catatumbo, lo acompañan Organizaciones Defensoras de Derechos Humanos, organizaciones de desplazados y de victimas, medios de comunicación y Personeros. En este espacio también se cuenta con el acompañamiento de las Alcaldías del Catatumbo.
El COMITÉ PERMANTENTE DE REFUGIO HUMANITARIO está hoy en la ciudad de Cúcuta, es la voz de los más de 20000 campesinos que respaldan la necesidad de la permanencia del Refugio Humanitario en el Catatumbo, asimismo, están solicitando a las autoridades la reactivación de las audiencias populares, como ese espacio de participación efectiva y de las Mesas de Interlocución y Acuerdo (MIA) que permite a los campesinos y campesinas del Catatumbo reconocerse como actores que al compartir situaciones determinadas, tienen la oportunidad de identificarse con unos intereses, con la idea de la construcción de un plan de desarrollo propio para la permanencia en el territorio, con las expectativas de re-construir su economía campesina, de crear zonas de reserva campesina y de demandar ante los gobiernos el respeto a sus derechos.
Igualmente están solicitando a las autoridades nacionales y a la AGENCIA PRESIDENCIAL PARA LA ACCION SOCIAL Y LA COOPERACION INTERNACIONAL (ACCION SOCIAL), la aprobación de los siete criterios para la construcción de un programa piloto para la sustitución de cultivos de uso ilícito, que no busca otra cosa que construir un modelo de sustitución de cultivos de uso ilícito, para recuperar la economía campesina tradicional. Este plan piloto fue presentado por los campesinos de la región del Catatumbo a Acción Social, las autoridades municipales y departamentales en el marco de las audiencias populares que se venían celebrando a lo largo de 2009 y 2010, y ha sido avalado por un número significativo de alcaldes del Catatumbo, sin que a la fecha se conozca la posición del gobierno nacional frente a esta propuesta presentada desde el sector campesino.
Esperamos que hoy en Cúcuta nos atiendan y nos cumplan con los compromisos y atiendan nuestras legitimas demandas: que paren los procesos de erradicación de cultivos de uso ilícito, que atiendan nuestras demandas de tierra para los campesinos a través de las ZONAS DE RESERVA CAMPESINA en el CATATUMBO, la Construcción de un Plan de desarrollo para el Catatumbo, el cese de la explotación minera y de los proyectos de explotación de Carbón a cielo abierto en la región en la reserva forestal del Catatumbo; La construcción de un plan piloto para la sustitución de cultivos, la presencia de las autoridades del orden nacional para la interlocución de los puntos planteados, el cierre de los montajes judiciales, las ejecuciones extrajudiciales, la persecución a las organizaciones y la militarización.
POR LA VIDA, LA DIGNIDAD, LA TENENCIA EN EL TERRITORIO Y LA PERMANENCIA EN EL CATATUMBO
Antecedentes de la situación en el Catatumbo
La región del Catatumbo se encuentra en el departamento de Norte de Santander. Está conformada por los municipios de Teorama, El Tarra, Tibú, Convención, Hacarí, San Calixto, El Carmen, Sardinata y La Playa.
El Catatumbo ha sido una de las regiones más golpeadas por la violencia y el abandono estatal, lo que ha dejado miles de campesinos asesinados, desplazados y desaparecidos.
Tras la desmovilización de los paramilitares, empiezan a tener el control de la zona la Brigada 30 y la Brigada Móvil No 15 del Ejército Nacional. A la vuelta de dos años (2006- 2008) el resultado desafortunado nuevamente para el campesinado fue la ejecución extrajudicial de 68 inocentes campesinos quienes fueron presentados como supuestos »guerrilleros dados de baja en combate», situación que generó un gran escándalo a finales de 2008, con la muerte de los jóvenes de Soacha encontrados en Ocaña y que posteriormente esta situación de violación y vejámenes por parte del Ejército Nacional llevó a la destitución del General de la Brigada 30 y la destitución de la BM No 15 retirando las fuerzas militares de la región por sus irregularidades e inconsistencias en contra de la población civil.
Paralelamente, los empadronamientos (toma de fotografías y datos de las personas), los bombardeos a veredas, el abuso de la autoridad, la militarización, la restricción del campesinado para moverse en determinadas horas de una vereda a otra, son muestra de la grave situación que nuestra región está viviendo y que día a día se agudiza como dan muestra los hechos ocurridos el pasado 6 y 7 de febrero de 2010 cuando se llevaron detenidas a 12 personas de la región reconocidas por la comunidad por ser líderes comunales, finqueros, privando de la libertad a estas personas durante 91 días.
La lista de órdenes de captura ascendía a 68 personas, muchas de ellas conocidas por la comunidad, sin embargo el 7 de mayo con gran alegría para las familias y las personas detenidas fue levantada la medida de aseguramiento, pero, en el mes de agosto les volvieron a dictar medida de aseguramiento a 17 personas.
Pero las violaciones a los derechos humanos se mantienen como una esfera dando vueltas por la región como ocurrió en el municipio del Tarra donde miembros del ejército nacional que tienen puesto de control en el casco urbano del municipio del Tarra, causaron la muerte del joven LUIS ESTEBAN CAMPO ROLON el pasado mes de agosto, lo que generó la reacción sin pensarlo dos veces de la comunidad Tarrense y sus alrededores, indignados por tal hecho.
Pero sumado a toda esta situación de violación de derechos humanos, nos encontramos con la otra realidad de la región, la falta de inversión social, la falta de interlocución y concertación entre el gobierno y las comunidades campesinas; quienes a través de la organización comunal como lo anteceden las marchas campesinas de 1996 y el éxodo campesino de 1998 donde más de 20 mil personas marcharon hacia la ciudad de Cúcuta solicitándole al Gobierno Departamental una solución ante la siembra de »coca» como primera economía del campesinado por la falta de inversión social y que como alternativa se planteaba la elaboración conjunta »comunidad –gobierno» de un Plan de Desarrollo alternativo para la región del Catatumbo, donde se garantizara la comercialización de los productos, vías, salud, educación, vivienda; sin embargo después de dos años de incumplimiento, la respuesta fue el asesinato, el desplazamiento, el exilio de líderes y lideresas comunales, quedando las promesas en el papel.
Hoy después de 11 años seguimos intentando interlocutar con el gobierno de manera pacífica, por eso el 29 de abril de 2009 después de las erradicaciones y fumigaciones en la parte baja de la región municipios (Tibu, Teorama y Convención), los campesinos nos declaramos en CAMPAMENTO DE REFUGIO HUMANITARIO »Por la Vida, la Dignidad, la Tenencia de la Tierra y la Permanencia en el Territorio». Donde nos concentramos más de 800 campesinos de los diferentes municipios, para llamar la atención del gobierno local, departamental y nacional, para la interlocución y la búsqueda de posibles soluciones frente a las familias que han quedado damnificadas por la erradicación manual forzada, sin haberse concertado con anterioridad una sustitución gradual.
Los 7 criterios presentados por los campesinos del Catatumbo a Acción Social y al Gobierno para un proyecto piloto de sustitución gradual de cultivos
1. El programa de sustitución de cultivos de uso ilícito debe fundamentarse en reconocer que el accionar criminal de dicha actividad, está en la transformación del cultivo y su comercialización; por lo tanto, debe entenderse que los sujetos y comunidades involucradas en el cultivo de la coca, no son delincuentes ni narcotraficantes, sino campesinos dedicados a trabajar la tierra, que son ciudadanos a quienes se les debe garantizar y proteger sus derechos humanos, económicos, sociales y culturales, y, procurar, por su condición de vulnerabilidad, el goce efectivo de sus derechos. Victimas del gran capital multinacional y trasnacional.
2. Debemos construir un modelo, una propuesta de sustitución de cultivos de uso ilícito, de manera participativa, que sea aplicado experimentalmente en una comunidad, a manera de proyecto piloto, para que éste pueda ser ajustado y se haga una evaluación de sus impactos, antes de ser extendido a las demás comunidades de la región del Catatumbo. Se debe identificar las zonas, las familias e intentar sustituir está práctico para recuperar la estructura campesina.
3. El proyecto piloto, debe contar con el apoyo, asesoría, monitoreo y veeduría de la comunidad internacional y de instituciones y organizaciones de carácter nacional que conciban los cultivos de uso ilícito como una problemática social, resultado del abandono estatal y del conflicto armado en la región, y no como una estructura delictiva. Por lo tanto, las organizaciones e instituciones que acompañen estos programas deben ser estructuras civiles y no militares, ni policiales, para cambiar el enfoque que hasta ahora se le ha dado a los programas de erradicación de cultivos de uso ilícito, los cuales, claramente tienen un carácter de persecución delictiva y no, de manejo social. Entonces en dicho proyecto no debe haber presencia de ninguna fuerza militar ni policial por el carácter social que este lleva implícito.
4. El modelo de sustitución de cultivos de uso ilícito debe ser gradual. Esta gradualidad debe entenderse en distintos ámbitos: el regional, el comunitario y el familiar, en donde se conciba que se requieren años para la total sustitución, porque debe hacerse progresivamente y acompañados de la siembra o producción de cultivos que genere ingresos económicos que permitan la manutención familiar y la supervivencia de la comunidad.
5. Debe garantizarse a la comunidad que se somete al programa de sustitución de cultivos de uso ilícito, el acceso, la gratuidad, la permanencia y la calidad a la salud, a la educación, a la vivienda, a la alimentación y al saneamiento básico. Debe incorporarse subsidios (por un periodo de dos años) para acompañar el proceso de transición y evitar que estas familias pierdan su calidad de vida; por el contrario el programa debe desarrollarse procurando condiciones de vida digna erradicando las razones sociales y las condiciones de pobreza, por las cuales el cultivo de la mata de coca, es una opción de supervivencia.
6. El modelo de sustitución de cultivos de uso ilícito, debe fundamentarse en el desarrollo de proyectos productivos, concertados con las comunidades y orientados a garantizar la soberanía alimentaria, a favorecer el ejercicio de su autonomía y a retornar a la economía campesina de la región, con un sistema de mercadeo justo.
7. Que se suspenda por parte del estado, las acciones catalogadas como delictivas, y al contrario, a los individuos y comunidades involucradas en el programa piloto de erradicación de cultivos de uso ilícito, garantizarles sus derechos civiles y políticos y hacer una distinción favorable. Considerando, que puede arrojar mejores resultados un acompañamiento social y no la persecución delictiva de esta actividad.
La respuesta de Acción Social, hasta el momento ha sido mantener los proyectos ya establecidos por el gobierno como familias guarda bosques, familias en acción, el programa RESA etc, sin escuchar las propuestas dadas por el campesinado.
ÚLTIMOS HECHOS:
El domingo 3 de octubre del presente año inician la erradicación manual forzada en el Catatumbo medio y bajo, generó la protesta generalizada de al menos 2000 campesinos de la zona.
El lunes, 4 de octubre la vía El Tarra – Tibu fue bloqueado el paso de vehículos por parte de al menos 200 campesinos del corregimiento de Filo gringo, y 300 campesinos protestaron en la vereda San Martin, municipio del Tarra.
De igual manera se levantaron en protesta por medio de asentamientos provisionales los corregimientos de San Pablo, Aserrio, Cecilia, San Juancito pertenecientes al municipio de Teorama y el corregimiento El Paso, 4 asentamientos que están en las veredas de platanal, santa lucia, el socorro y vega larga del municipio de Teorama, con el objetivo de llamar la atención de la gobernación, defensoría del Pueblo, Personerías, gobierno nacional para buscar una solución ante las erradicaciones manuales forzadas, sin embargo la respuesta ha sido la ausencia y el silencio ante las propuestas del campesinado. Las comunidades se mantienen en asentamientos hasta establecer un dialogo con el gobierno.
El lunes 11 de octubre se crearon otros asentamientos en la vereda Mesones, Corregimiento de San Pablo, municipio de Teorema, donde además se le han sumado otras veredas de los municipios de Teorama, Tarra y San Calixto.
El jueves 14 de octubre se registraron disturbios entre las fuerzas militares y el campesinado que se encontraba en el asentamiento de la vereda Mesones, simultáneamente helicópteros estaba descargando al Escuadrón Antidisturbios.
El viernes 15 de octubre El Escuadrón Anti disturbios ataco a la comunidad campesina asentada en la vereda Mesones, lo que generó el desplazamiento y dejo al menos 10 campesinos heridos a causa de los gases lacrimógenos y los golpes, se denuncia además que el ejercito a disparado en repetidas ocasiones intimidando a la población civil y poniendo en riesgo la vida de las personas que están protestando.
Después del silencio sepulcral que existe por parte de los noticieros nacionales y regionales EL COMITÉ PERMANENTE DE REFUGIO HUMANITARIO le damos a conocer la situación actual que se está viviendo en la región del Catatumbo, a la comunidad nacional e internacional, solicitando la difusión de la noticia.